alguien (Noriega) me comentó el día de hoy sobre los estragos que la lluvia ocacionó en Tabasco. -"póbrecitos..." fue lo mejor que pudo salir de esa boca... así como sin fuerza, sin voluntad..., algo sonó pero nada hizo eco en mi.
Recordé entonces las imágenes de los niños con los ojos desolados pensando tal vez que tenían frío... hambre qué se yo. Las miradas de las madres que levantan la cara al cielo;no sé si tratando de adivinar si eso ha sido todo o si hay algo más aguardando para descender sobre las innundadas calles de la capital del estado... o tal vez preguntandole al todo poderoso: ¿Por qué Señor...?
Y al primer plano de mis ideas volvió esa frase que hace muchos años (unos... 10), un profesor de Secundaria utilizó para referirse a la ciudad en que vivimos.
"piénsenlo muchachos... vivimos en tierra de santos"
...tierra de santos; donde no se innunda, no tiembla, no hay huracanes, tornados u otra calamidad de alcances mayores a una tormenta una o dos veces por año. Nada que en lo personal no disfrute. (la última vez estuve buen rato parado a la mitad de la calle sin alumbrado público y el cielo iluminado por relámpagos... delicioso)
Mi ciudad apenas rebasa los 100 mil habitantes. La zona centro es un área de 10 x 10 manzanas. Una gran cantidad de colonias aledañas. Un par de boulevares y algunas calles amplias. No hay un centro comercial. Pero sí un par de tiendas de grandes cadenas de víveres. No hay un cine ni una gran biblioteca, pero puedes conseguir casi lo que sea con una decente conexión a internet.
A 20 km. del Walmart, MacDonalds u OfficeDeppot más cercano..., o algo cuyas ganancias no se quede dando vueltas mayormente en el país.
Qué más dá... si vivimos en el desconocido Aztlán. De donde surgió la peregrinación que una vez se asentó en el Valle de Texcoco y fundó el imperio Azteca. Aqui en la zona centro de la región del Anahuac. A las faldas del
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